A continuación, algunas recomendaciones para proteger tu identidad online:
Fortalece tus contraseñas
Es fundamental que uses contraseñas fuertes y únicas para cada una de tus cuentas. Evita contraseñas obvias como tu nombre, fecha de nacimiento o números de teléfono. Combina mayúsculas, minúsculas, números y símbolos para hacerlas más seguras. Considera usar un administrador de contraseñas para generar y almacenar claves únicas.
Activa la autenticación en dos pasos
La autenticación de dos factores o en dos pasos requiere no solo tu contraseña, sino también un código de verificación enviado a tu teléfono u otro dispositivo. Esto hace que sea mucho más difícil para un criminal acceder a tu cuenta aun teniendo tu contraseña. Activa esta opción en tus cuentas más sensibles.
Ten cuidado con emails y mensaje sospechosos
Los estafadores suelen utilizar emails y mensajes falsos para engañar a las personas y robar su información. No hagas clic en enlaces ni descargues archivos de remitentes que no conoces. Verifica siempre la dirección del remitente antes de abrir un mensaje. Si te llega un aviso extraño de tu banco u otra empresa, confírmalo directamente con ellos antes de responder.
Protege tu información personal
No compartas información personal (dirección, fecha de nacimiento, números telefónicos, etc) en redes sociales u otras páginas web a menos que sea estrictamente necesario. Retira periódicamente tu información de bases de datos públicas utilizando servicios como eliminalo.com. Tampoco divulgues detalles personales en encuestas o concursos online.
Utiliza conexiones seguras
Evita usar redes Wifi públicas para actividades sensibles como compras online o banca electrónica. Estas redes son más susceptibles a ataques. En su lugar, utiliza redes privadas con contraseña o la red de datos de tu teléfono. Verifica también que los sitios web inicien con “https” en lugar de sólo “http”, esto significa que la conexión está encriptada.
Revisa tus estados de cuenta
Monitorea regularmente los movimientos en tus cuentas bancarias y de crédito para detectar cualquier actividad irregular o cargos no reconocidos. Si identificas algún problema, notifica de inmediato a tu institución financiera. También solicita tu reporte crediticio una vez al año para revisar que no hayan cuentas o créditos abiertos indebidamente a tu nombre.
Ten precaución al comprar online
Realiza compras únicamente en sitios web conocidos y seguros. Verifica que la URL inicie en “https”. Busca el ícono de un candado en la barra de navegación que indica cifrado de datos. Utiliza tarjetas de crédito en lugar de débito por tener mayores protecciones en caso de fraude.
Protege tu equipo
Mantén actualizado el software y antivirus de todos tus dispositivos. No descargues programas de fuentes desconocidas. Realiza copias de seguridad periódicas en una nube privada o disco duro externo como precaución ante posibles ataques. Desactiva el inicio de sesión automático en páginas web para evitar accesos no autorizados.
Limita la exposición de tus datos
Piensa bien antes de compartir información personal online. Reduce al mínimo necesario los datos que proporcionas a cualquier sitio web o app. También configura las opciones de privacidad de tus cuentas para limitar la visibilidad de tu información.
Comunica los incidentes sospechosos
Si crees que has sido víctima de robo de identidad o algún tipo de fraude cibernético, repórtalo de inmediato a las autoridades competentes. También notifica a las instituciones financieras o empresas involucradas. Entre más rápido actúes, mayores posibilidades tendrás de recuperar tu identidad y evitar pérdidas.
Proteger tu identidad y privacidad en internet requiere estar alerta y tomar precauciones. Pero si sigues estas recomendaciones, podrás minimizar considerablemente el riesgo de convertirte en víctima de suplantación de identidad o fraudes cibernéticos. La prevención y rapidez de acción son claves para defenderte de estos crecientes crímenes virtuales.
